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presidenta electa de México Claudia SheinBaum y rey de españa felipe vi

México vs España: controversias sobre una reconciliación necesaria

"Un tema que dificulta la posibilidad de abrir un proceso de reconciliación entre España y México es la nula conciencia peninsular del dolor y la violencia que supusieron la conquista y la colonización"

Publicado: hace 9 horas


El Rey Felipe VI de España no fue invitado al cambio de mando en México que, desde el 1ero de octubre, ungirá, por primera vez en su historia, a una mujer en el más alto cargo público de la nación. Se trata de Claudia Sheinbaum, que representa la continuidad de Manuel López Obrador, del partido Morena, de clara tendencia progresista.

Los problemas con el monarca español comenzaron en marzo de 2019 cuando el expresidente López Obrador le envío una carta con la intención de iniciar un diálogo cuya finalidad era la reconciliación y el perdón entro los pueblos español y mexicano, en particular los pueblos indígenas mexicanos. En líneas generales, la carta estaba redactada dentro de los lineamientos de una política de reconciliación internacional. Se expusieron los crímenes y abusos que ocurrieron durante el periodo de la conquista y la colonización, se señaló que en una fecha próxima el Estado Mexicano republicano se iba a disculpa con sus pueblos originarios por motivos análogos y que se buscaba incorporar a España como parte de estos esfuerzos dirigidos a cerrar las heridas del pasado.

Cabe señalar, que existe vasta literatura sobre la reconciliación y procesos exitosos y fallidos que se han realizado durante los últimos setenta años. A este nivel, la pauta la marca el caso de la reconciliación francoalemana que se iniciara apenas 18 años después de terminada la Segunda Guerra Mundial, cuando Conrad Adenauer y Charles de Gaulle firmaron en París el Tratado de los Elíseos de 1963 con la finalidad de amistad a sus pueblos tras la conflagración. En la actualidad, una serie de instituciones creadas al amparo de dicho tratado siguen vigentes. Entre ellas se destaca la oficina para la juventud francoalemana que promueve intercambios juveniles entre naturales de ambos países.

En el caso hispano-mexicano hubo dos problemas. El primero es que la carta se hizo pública lo que motivó una tajante protesta del Ministerio de Exteriores español días después. En esta se señaló que había que trabajar pensando en el futuro. Luego, la carta dirigida al Rey nunca fue respondida por este y esa es la razón argüida por la presidenta Sheinbaum para no invitarlo al cambio de mando, lo que ha motivado una segunda reacción del gobierno español que ha calificado de inaceptable el desaire con su monarca. En respuesta, el gobierno peninsular no enviará al cambio de mando a ningún representante. Tratándose de una reconciliación, su inicio es mas bien penoso. Pero vamos por partes.

Si bien la carta de AMLO al Rey de España en 2019 se manifiesta en términos respetuosos, parece ya tener decidida la agenda y el resultado del proceso de reconciliación. Normalmente, estos procesos suponen una negociación entre partes. De esta manera, España podría lamentar los abusos ocurridos hace quinientos años resaltando,  además, las estupendas relaciones bilaterales presentes y México, a su vez, reconocer el aporte de la cultura española a la nación mexicana, el que resulta más que evidente. Es de esta manera que se realizan las reconciliaciones exitosas. La agenda tiende a ser flexible, y las partes van acercando posiciones.

Un tema que dificulta la posibilidad de abrir una negociación con estas características entre España y México, que podría extenderse a España y toda la América Hispánica, es la nula conciencia peninsular del dolor y la violencia que supusieron la conquista y la colonización. En los actuales tiempos, el argumento de que se trataba de épocas donde estas prácticas estaban normalizadas nos parece insuficiente. Además, diese la impresión de que existiese en España un imaginario civilizador sobre los pueblos americanos. En otras palabras, España habría traído la civilización allí donde no existía ninguna y esta mirada resulta poco aceptable para pueblos que hasta hoy reivindican sus propias culturas, civilizaciones y lenguas originarias. En realidad, resulta poco aceptable para cualquier americano que se precie de ser tal.

A nosotros nos parece que los trescientos años de presencia española en América sin duda supusieron un trasvase cultural. No por nada hoy la mayoría de los hispanoamericanos hablamos el español y somos cristianos. Pero al mismo tiempo, legó una herencia de violencia y sometimiento a las poblaciones naturales que son insoslayables y que, desgraciadamente fue continuada por los gobiernos republicanos incluso hasta bien entrado el siglo XX. Por eso López Obrador pide perdón también a nombre del propio Estado mexicano.

Pedir perdón no es fácil, ponerse en los zapatos del otro lo es menos. España está orgullosa de su obra civilizadora en América y, mal que nos pese, este es un elemento para tomar en cuenta cuando llegue el momento, si llega, de sentarnos a conversar de estos temas. Del otro lado, desde algunas posturas, poco falta para exigirle a España que se responsabilice materialmente por las heridas y cicatrices que el proceso de conquista y civilización dejó en América Latina. Nosotros pensamos que de lo que se trata es de estrechar a los descendientes de las partes en un abrazo refrendado por políticas públicas del reconocimiento y la inclusión.

En todo caso, no veo llegado el momento. Veo una España a la defensiva y a un México echándole más leña al fuego. Las reconciliaciones son difíciles, ambas partes siempre llegan a ellas con sus agendas maximalistas. Por ello es preciso la ponderación, la mano diplomática y la agenda abierta para llevarlas a cabo.

p.d. Sugiero a España, cada vez que se encuentre un galeón hundido, devolver el oro a América. Genera una imagen muy negativa litigar en el presente por tesoros que para muchos americanos significaron despojo y la explotación de los nativos. Muy aparte del derecho internacional, estoy hablando de un gesto paradiplomático. 


Escrito por

Daniel Parodi Revoredo

Máster en Humanidades por la Universidad Carlos III de Madrid, Historiador Docente en U. de Lima y PUCP. Opiniones personales


Publicado en

Palabras Esdrújulas

PALABRAS ESDRUJULAS por Daniel Parodi