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Glave y Salgado se abrazan en el hemiciclo. a la paridad le endosaron el voto preferencial  

#CanjePreferencial

Enrique de Navarra se volvió católico para reinar en Francia y dijo “París bien vale una misa”. ¿Qué diremos nosotros? ¿La paridad bien vale el voto preferencial y la corrupción que trae consigo?

Publicado: 2019-07-27

Hace un par de días aplaudí el abrazo entre las congresistas Marisa Glave y Luz Salgado en el hemiciclo, luego de que el congreso aprobase la paridad y alternancia entre hombres y mujeres en las listas al Congreso que se aplicará progresivamente entre las elecciones de 2021 y la de 2031 (2021 40%, 2026 45% y 2031 50 %). Pero ayer me enteré que el apoyo de Fuerza Popular a esta justa medida igualitaria no fue ni gratuito, ni de conciencia, ni espontáneo. La medalla luminosa tenía otra cara: se aprueba la paridad a cambio de mantenerse el voto preferencial, cuya eliminación era una de las reformas políticas más importantes planteadas por el poder ejecutivo.  

¿Por qué es importante eliminar el voto preferencial?

Las razones son varias, la primera es que cuando hay voto preferencial, cada candidato al congreso debe pensar en su propia campaña, la que debe ser distinta a la de los otros candidatos de su propia lista. La idea no es votar por la lista de Acción Popular, Partido Morado, o Fuerza Popular, sino que además marquen tu número. Y aquí es donde comienza la danza del dinero, y el marketing se apodera totalmente de la campaña y suplanta a la política.

Por cierto, una campaña para ti solo cuesta harta plata y entonces grandes intereses económicos financian las campañas a varios candidatos para que, de resultar electos, sirvan a sus objetivos y no a los del país. Es como lo de Odebrecht con los candidatos presidenciales, les financiaban las campañas para que luego le otorguen obras sobrevaluadas a cambio de coimas.

Toda vez que, con el voto preferencial, de poco sirve que el partido coloque en los primeros lugares a sus mejores cuadros, se produce la fiesta de los aventureros. En el Perú, cuando hay voto preferencial la plata manda sin importar de donde proviene. Y llegará la plata del contrabando, de bandas de extorsionadores, de taladores ilegales, de mineros informales, de narcotraficantes, de los cuellos blancos del puerto, todos buscando concesiones, limpiar sus negocios o cubrir sus actividades ilegales a través de las gestiones de los congresistas que han comprometido durante la campaña al financiársela. Y se mantendrán, por ello mismo, los partidos sintéticos, los vientres de alquiler que se les llama.

Sin el voto preferencial, se asegura la elección al congreso de los mejores cuadros de cada partido. Con la lista cerrada, si tu partido obtuvo 10% en Lima pues le corresponde 4 congresistas que serán los primeros 4 números (1,2,3,4) de la lista parlamentaria de tu partido. Estos 4 serán los mejores cuadros políticos de tu partido porque es tu propio partido quien, previamente, los colocó en los primeros lugares al realizar sus elecciones internas.

Estoy pensando en las elecciones de 1980, por Acción Popular resultaron electos políticos de primer nivel como Manuel Ulloa o Javier Alva Orlandini, por el APRA Luis Alberto Sánchez y Andrés Townsend, por el PPC Mario Polar y Roberto Ramírez del Villar, Por la izquierda Carlos Malpica y Genaro Ledesma. Ya sé que a la lista anterior le falta la cuota de género, por eso es buena la paridad, pero no resignando la posibilidad de que el partido político nos ofrezca a sus mejores cuadros para convertirse en congresistas.

Por todo lo dicho, al final de la ecuación, seguiremos eligiendo pésimos congresos y lo peor de todo es que eso alcanza también a las mujeres: no se elegirá necesariamente a las aptas y capaces si no a aquellas que puedan financiarse una millonaria campaña posiblemente con dinero mal habido.

¿La lista cerrada soluciona todos los problemas?

Ciertamente no, la corrupción es transversal a nuestra política, de derecha a izquierda, y aún con lista cerrada pueden resultar electos malos congresistas; también es verdad que, en la minoría de los casos, con el voto preferencial podría premiarse una trayectoria o la legitimidad que otorga un liderazgo social o político bien valorado por la ciudadanía. 

Pero con la reforma política en curso se buscaba iniciar la transición hacia la mejora de la calidad de nuestras instituciones políticas y nuestros representantes. Se buscaba también animar a la sociedad civil a participar en política reduciendo las barreras para la formación de un partido político y se buscaba, principalmente, que cada vez menos representantes del pueblo resulten electos con campañas financiadas por dinero mal habido. Se buscaba entonces que la meritocracia tenga más lugar para expresarse en un medio republicano viciado por la corrupción.    

Para terminar

La hipótesis del canje no la puedo demostrar, no soy -ni quisiera serlo jamás- Moisés Mamani, ni tengo un huachafísimo anillo de oro escondiendo una cámara de video. Sin embargo, mi planteamiento se colige de que me parece poco probable que, al momento de la votación y de los abrazos, no se supiese que la paridad traía en el bolsillo el contrabando del voto preferencial. Si me equivoco, si se tratase de un engaño fujimorista, los y las engañadas tendrán que denunciarlo a los medios de comunicación; de lo contrario, cada ciudadano y ciudadana sacarán sus propias conclusiones

En los estertores del siglo XVI, Enrique de Navarra, pretendiente hugonote al reino de Francia, eligió convertirse al catolicismo para ser rey de Francia, a él se le adjudica la frase “París bien vale una misa”. ¿Cuál debería ser la nuestra? ¿La paridad bien vale el voto preferencial y la corrupción que este trae consigo? La ciudadanía merece explicaciones.

Les deseo a todos y todas unas felices fiestas patrias.

Historiador Daniel Parodi Revoredo


Escrito por

Daniel Parodi Revoredo

Máster en Humanidades por la Universidad Carlos III de Madrid, Historiador Docente en U. de Lima y PUCP. Opiniones personales


Publicado en

Palabras Esdrújulas

PALABRAS ESDRUJULAS por Daniel Parodi