#ElPerúQueQueremos

COMPRA A TODOS (o casi todos)  PARA LLEGAR AL PODER 

ACUÑA y MONTESINOS. La terrible analogía

Montesinos lo compraba todo y a todos desde la cúspide del poder, mientras que Acuña quiere llegar a la cúspide del poder comprándolo todo y a todos

Daniel Parodi Revoredo

Publicado: 2016-02-04


Cuando salió la noticia de que César Acuña había cometido plagio en su tesis doctoral de la Complutense, lo primero que pensé fue que no había plagiado, sino que se la había mandado hacer. Lo segundo que pensé es que toda su carrera debió hacerla de esa manera y, efectivamente, hoy se duda de la autenticidad de todos sus estudios superiores. ¿Está mal lo que hizo Acuña? Seguro que sí ¿lo descalifica de seguir en la carrera electoral? es lo más probable, pero también es cierto que existe un contexto sociohistórico que lo explica y es a este al que quiero referir en estas líneas.

En la década de 1980 se produjo lo que Matos Mar llamó el desborde popular, que puede resumirse en que el Estado no pudo satisfacer la enorme demanda de servicios, entre ellos la educación, de millones de peruanos que formaban parte de una población que crecía y migraba vertiginosamente de la sierra a la costa. Hablamos de compatriotas cuyo milagro no fue solo sobrevivir edificando ciudades sobre arenales, sino creando una economía al margen de la economía formal, tanto como un código de convivencia al margen de la ley. No se trataba de violarla, sino de prescindir de ella en un contexto de vertiginosa transición sciodemográfica.

Lo que tuvimos desde entonces fue una sociedad que se reorganizó desde sus propios consensos y que hoy, emergiendo el Perú de la crisis, nos enfrenta al desafío de encontrar las herramientas claves para volver a la institucionalidad sin muertos y heridos en el camino.

César Acuña

Acuña nació en la sierra de Cajamarca en 1952 y fue parte de la segunda oleada migratoria, la de Velasco y se matricula en la Universidad Nacional de Trujillo a cursar la carrera de ingeniería química. Es en ese trance que su olfato para los negocios lo lleva a incursionar en las academias preuniversitarias: allí su vida cambió.

César Acuña había encontrado el Dorado, la ciudad de oro perdida en los servicios educativos, ahora se trataba de multiplicarlos y con ellos su riqueza y poder. Ese sería desde entonces el derrotero de su vida en una sociedad cuyas reglas de juego consisten en que no las haya (Hugo Neira dixit), o en la que podían obtenerse resultados mucho más rápido saltándoselas. Y es así como debió comprarlo todo con plata como cancha, desde el silencio de quienes quería callar hasta sus títulos académicos en el Perú y el extranjero, en todo caso que lo diga el juez.

Al escribir estas líneas me planteé un paralelo entre Vladimiro Montesinos y César Acuña, y me salió la siguiente frase: Montesinos lo compraba todo y a todos desde la cúspide del poder, mientras que Acuña quiere llegar a la cúspide del poder comprándolo todo y a todos. Los caminos son distintos pero la meta es la misma. No nos equivoquemos: Acuña en el poder será como Montesinos porque no conoce otra manera de actuar, quizá algo menos inteligente pero, a diferencia del condenado, ciñendo él mismo una banda presidencial.

desde el poder compro a todos (o casi todos)


Lo que debemos preguntarnos, de cara a las próximas elecciones es qué sociedad queremos, ¿una que establezca definitivamente la “tierra de nadie” en la que Acuña amasó su fortuna? u otra que, con responsabilidad y proyectos de largo plazo, siente las bases de la república democrática e institucional que asegure el progreso de todos los peruanos.

Daniel Parodi Revoredo

Candidato al Congreso #23

Alianza Popular

@parodirevoredo 


fanpage: DANIEL PARODI AL CONGRESO NACIONAL - ALIANZA POPULAR 

https://www.facebook.com/Daniel-Parodi-al-Congreso-Nacional-Alianza-Popular-979765672090997/?ref=hl


Escrito por

Daniel Parodi Revoredo

Máster en Humanidades por la Universidad Carlos III de Madrid, Historiador Docente en U. de Lima y PUCP. Opiniones personales


Publicado en

Palabras Esdrújulas

PALABRAS ESDRUJULAS por Daniel Parodi